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Reflexiones en Casa Juan Diego sobre la tormenta tropical Imelda y el cambio climático

por L. V. Diaz

Continuando la tradición de Marcos Zwick de compartir la fe a la luz de las realidades actuales con los huéspedes de Casa Juan Diego, anoche reflejamos con los 35 hombres de Casa Don Marcos sobre la tormenta tropical Imelda aquí y el cambio climático.  Compartimos una sección sobre el cambio climático de la encíclica Laudato Si del Papa Francisco. Mencionamos las manifestaciones alrededor del mundo ayer sobre el cambio climático, y el próximo sínodo sobre la Amazonía.

Estuvimos un poco sorprendidos cuando el grupo de hombres aplaudió espontáneamente después de que uno de los líderes del grupo de nuestro equipo leyó parte de Laudato Si.

Y luego, oramos juntos una oración de Laudato Si:

Oración cristiana con la creación

Te alabamos, Padre, con todas tus criaturas,
que salieron de tu mano poderosa.
Son tuyas,
y están llenas de tu presencia y de tu ternura.
Alabado seas.

Hijo de Dios, Jesús,
por ti fueron creadas todas las cosas.
Te formaste en el seno materno de María,
te hiciste parte de esta tierra,
y miraste este mundo con ojos humanos.
Hoy estás vivo en cada criatura
con tu gloria de resucitado.
Alabado seas.

Espíritu Santo, que con tu luz
orientas este mundo hacia el amor del Padre
y acompañas el gemido de la creación,
tú vives también en nuestros corazones
para impulsarnos al bien.
Alabado seas.

Señor Uno y Trino,
comunidad preciosa de amor infinito,
enséñanos a contemplarte
en la belleza del universo,
donde todo nos habla de ti.
Despierta nuestra alabanza y nuestra gratitud
por cada ser que has creado.
Danos la gracia de sentirnos íntimamente unidos
con todo lo que existe.

Dios de amor,
muéstranos nuestro lugar en este mundo
como instrumentos de tu cariño
por todos los seres de esta tierra,
porque ninguno de ellos está olvidado ante ti.
Ilumina a los dueños del poder y del dinero
para que se guarden del pecado de la indiferencia,
amen el bien común, promuevan a los débiles,
y cuiden este mundo que habitamos.

Los pobres y la tierra están clamando:
Señor, tómanos a nosotros con tu poder y tu luz,
para proteger toda vida,
para preparar un futuro mejor,
para que venga tu Reino
de justicia, de paz, de amor y de hermosura.
Alabado seas.
Amén.