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Ser inmigrante, ayudar al prójimo, o hacer las Obras de Misericordia se considera contra la ley con penalidades fuertes, según H. R. 4437 sobre reforma de inmigración

Acabamos de regresar de visitar nuestras casas para hombres enfermos, donde muchos de nuestros huéspedes viven que están muy enfermos y recha-zados por nuestra sociedad, el leer en el Houston Chronicle (17 de diciembre 2005) que la Casa de Representantes (no el Senado) ha pasado una propuesta de ley que declararía a todos estos hombres criminales y malvados y sujetos a un año de prisión por no tener documentos.

En esta nueva legislación hay una tremenda expansión de lo que constituye contrabando y albergar de un indocumentado – darle un cigarrillo un sándwich o un vaso de agua a un inmigrante puede ser razón suficiente para hacerlo a uno un delincuente.

En un gran barrido, nuestros representantes han resuelto el problema de la inmigración al crear como sospechosos a cualquier hispano hablante que vive y trabaja en los EUA, y eso para no mencionar a aquellos que se asemejan a los hispanos

El Brownsville Herald declaró, Los promotores de esta legislación consiguen lo que quieren, los trabajadores inmigrantes que construyen casas, limpian los cuartos de los hoteles, trabajan en jardinería, y se afanan en trabajos de manufactura serán amontonados con algunos de los peores criminales de este país.”

Muchas industrias nuevas tendrán que ser desarrolladas para cuidar de lo ofensores. Solo imagínese cuantas prisiones hospitales tendrán que ser construidos para cuidar de los enfermos y heridos inmigrantes que ya han sido rechazados y dejados a sufrir o morir por su cuenta. Ellos se cuentan en los miles. Vendrian por todos los paralizados que han caido de scaffolds en Houston mientras construyeran los edificios?

No seria esta una ironía? Una vez que han sido declarado criminales, la sociedad será requerida a servirlos en prisiones después de años de negligencia deliberada

Se tendrán que construir más prisiones para todos los carpinteros y trabajadores de cemento que han construido todos estos condominios y apartamentos que ahora nos agobian en Houston. Los constructores, se puede estar seguro, arreglarán para evitar el arresto hasta que las construcciones estén completas, por que todos sabemos quien construye en Houston.

Algunos, por supuesto, pensarán que esto es maravilloso – aquellos que colocan a los edificios de las prisiones como gran parte del Producto Nacional Bruto (que coincidencia – realmente es bruto!) Las prisiones no podrían estar edificados lo suficientemente rápido, por supuesto, para albergar a millones de “criminales” que hoy en día son nuestros mejores trabajadores. Se tendrán que establecer nuevas oficinas a través de los EUA para recibir las denuncias de “extranjeros”. Los maestros de las escuelas podrán reportar inmigrantes indocumentados como se reportaban a cualquiera que estuviera en desacuerdo en los países comunistas. Los doctores en los cuartos de emergencia podrán reportar a los más enfermos para que se los lleven a prisión.

Aquellos que diseñaron esta legislación han guardado las mejores consecuencias para la última parte del complot. Ellos creen que sentencias de prisión hasta por cinco años deben ser impuestas a los empleadores de las agencias de servicios sociales y los de los apostolados de iglesias que asistan a los inmigrantes con sus necesidades más básicas.

Así es que, mezclados con los criminales inmigrantes estarían los de servicios sociales que quedaron leales a su llamada y vocación.

Como dijo un Representante del estado de Texas quien opuso a esta legislación, “Si en una noche de silencio, cuando todo está calmado y brillante un jóven y una mujer obviamente embarazada, de otro pueblo, piden posada en su establo-cuidado! primero verifiquen sus visas!

Trabajador Católico de Houston, Vol. XXVI, No. 1, enero-febrero 2006.