La Corte Suprema ha tomado una decisión, en un voto de 8 contra uno, en favor del derecho de no ser considerados como estafadores o extorsionadores a los estaoudinenses que protesten en acción directa y sin violencia. A través de la red de la Túnica sin Costura, la Casa Juan Diego, junto con varias otras comunidades del Trabajador Católico, la Oficina de Justicia Franciscana, Feministas por la vida en Nueva York, la Conferencia Southern Christian Leadership, Liz McAllister, Phil y Dan Berringan, SJ, y Wendell Berry entre otros, firmaron como Amicus Curiae en el caso de Scheidler et al v. Organización Nacional de las Mujeres (NOW) y Operación Rescate v Organización Nacional de las Mujeres.
Mientras que este caso particular era un caso de protesta pro vida, en que los manifestantes habían sido condenados en un caso civil bajo la ley de RICO (Organizaciones influenciadas por corrupción y estafa) y el Acta de Hobbs, que provee por acciones civiles y criminales contra individuos que se ocupan en la extorsión, así como también el Acta de Viajes, los Amici entendieron que este juicio debería permanecer, todos los manifestantes deberían estar sujetos a la mala interpretación de la ley. En este caso la Corte de Apelaciones todavía no había validado la condena y la multa de $250,000, pero había emitido un mandato nacional contra los protestantes de pro vida.
El escrito de la Red de la Túnica sin Costura Amici argüía que al hacer sujetos de las protestas en este caso legal a casi todos los otros asuntos conflictivos – e.g. derechos de animales, derechos civiles de homosexuales, eutanasia, pena de muerte, discriminación racial, entrenamiento de la policía Latino Americana en técnicas de tortura, tratamiento de los desposeídos; y la asombrosa amplitud (nacional) y la larga duración permitida en este caso contra manifestantes no violentos, hacia sonar las campanas de alarma: Puesto que no puede haber acercamiento consistente al poder judicial que pueda identificar y definir a un tópico corriente y controversial con menor mérito de protección de cualquier otro, debido a la Primera Enmienda.
La pregunta ante la corte era si bloquear el acceso a un negocio constituye extorsión. La Corte Suprema normó que puesto que los manifestantes no obtuvieron o intentaron obtener la propiedad de los demandantes, y que tampoco persiguieron o recibieron algo de valor, ellos entonces no eran culpables de extorsión, que las decisiones bajo los Actos Hobbs y RICO requerían prueba de ambos “privación o adquisición de propiedad.” Los manifestantes podrían ser culpables de coerción pero no de extorsión.
La Corte normó: “Debido a que los actos predicados soportando el fallo de los jurados de una violación RICO deben ser revertidos, el juicio de que los suplicantes violaron RICO debe ser revertido. Sin una razón subyacente de violación RICO, el mandato emitido por la corte del distrito debe ser necesariamente nulo. El juicio de la Corte de Apelaciones es por lo tanto revertido.
Aquellos que apoyamos a los manifestantes en la Suprema Corte comprendimos que bajo la salvajemente amplia inter-pretación de esta ley que había sido aprobada al nivel de la Corte de Apelaciones, se le podría haber considerado a Martin Luther King como un extorsionador. La juez Ginsburg escribió una opinión concurrente con el del Jefe de Justicia Rehnquist, en la que hacia énfasis en que “el efecto principal de una decisión contra los solicitantes aquí podría haber sido en otros casos perseguidos bajo RICO.” Rico impone varias penalidades criminales severas y duras penas civiles: “hasta 20 años de prisión y una amplitud de rango de confiscación desde una sola violación criminal, y extensa cobertura civil y triple indemnización de daños y costos de abogados para demandantes privados.” El juez Ginsburg notó en los argumentos orales se le había preguntado al gobierno: “Esta usted de acuerdo que su interpretación podría haber sido aplicable a las huelgas de asiento de los derechos civiles?”
El Solicitante General respondió: “Bajo algunas circunstancias, podría haber sido, si la fuerza ilegal o las amenazas hubiesen sido utilizadas para impedir el funcionamiento de un negocio.”
Es chocante que en sus conferencias de prensa NOW ha anunciado que puesto que su esfuerzo de declarar a los manifestantes pacíficos como extorsionadores ha fallado, ahora van a intentar perseguirlos como terroristas. ¨Estamos defendiendo a la libertad? Esperamos que NOW y Planificación Familiar no se hagan violentos.
Trabajador Católico de Houston, Vol. XXIII, No. 3, mayo-junio 2003.